Las fusiones en cualquier industria casi siempre traen grandes noticias, pero atraen mucha más atención cuando suceden entre dos de los jugadores más competitivos del área. Según algunos, es exactamente lo que está a punto de suceder entre algunos de los nombres más conocidos de la industria transportista. COSCO y China Shipping (dos de las más grandes empresas transportistas en China y la sexta y séptima más grande del mundo) recientemente han insinuado una posible fusión, incitando una gran especulación sobre lo que podría significar esta sociedad.
¿Se unirán o no?
Aunque los representantes de ambos grupos declinaron hacer una declaración oficial, otras fuentes no han sido tan cerradas con respecto al arreglo. Una fuente (que pidió permanecer en el anonimato) admitió que “el asunto está bajo discusión”, mientras que la revista china de negocios Caixin reportó que el gobierno central había girado instrucciones para que las dos empresas comiencen a esbozar un acuerdo. Dada la estructura política en China y la fuerza del gobierno central, un decreto como este que viene “directo desde arriba”, por lo general significa una pronta acción concreta.
Efectivamente, las dos empresas propiedad del estado dejaron de intercambiar acciones el 10 de agosto, alegando “asuntos mayores” en los trabajos que les estaban impidiendo sus transacciones futuras. Un ejecutivo de COSTO cuyo nombre no fue señalado ha fijado un cronograma para el acuerdo, señalando que ambas potenciar tienen tres meses para lograr esbozar su contrato. El rumor señala que la nueva organización incluirá cinco oficinas gerenciales (tres de China Shipping y dos de COSCO) mientras que el presidente de China Shipping, Xu Lirong, conservará su cargo.
Restructuración para el poder
El gobierno chino tiene mucha motivación por hacer esta movida, también. Beijing recientemente dio a conocer un plan por reestructurar muchas de sus empresas propiedad del estado en un intento por mejorar la eficiencia, reducir la “sobrecargar” de grandes corporaciones y por último aumentar la competitividad del país en el extranjero. El 2015 ya ha sido testigo de la fusión de otras principales corporaciones chinas, incluyendo dos constructoras de trenes y dos de las empresas de energía nuclear más grandes del país.
Hasta que COSCO y China Shipping no emitan sus propias declaraciones confirmando la noticia, estos informes son oficialmente “especulativos”. Sin embargo, el conocido enfoque de China de manejar sus negocios y el seguimiento reciente de la reorganización inclinan las balanzas fuertemente a favor de una inminente fusión. Si esto se concreta y cuando se realice, se contará con la fusión de una nueva empresa transportista con los recursos y el peso suficientes como para salpicar con fuerza el transporte marítimo, y China puede obtener exactamente la fuerza global que busca.
