Durante los últimos 100 años, la principal conexión entre los Océanos Atlántico y Pacifico ha sido el Canal de Panamá. Los dueños de carga que necesitan transportar su mercadería alrededor del mundo a menudo hacen uso del pequeño canal, el cual permite que las embarcaciones reduzcan una considerable cantidad de tiempo en sus viajes. La historia podría decir que, los Estados Unidos poseen control principal no solo en el Canal de Panamá, sino también del Canal de Suez, así como de las principales rutas comerciales a través de Singapur, Gibraltar y otras regiones.
El gran Canal interoceánico planificado a través de Nicaragua:
En los próximos años, los Estados Unidos pudieran estar enfrentando la competencia en el control de aguas internacionales. ¿Por qué? Pues porque debido a que Rusia ha entrado en negociaciones con China y Nicaragua para construir el gran Canal interoceánico. La ruta, rechazada por los ingenieros estadounidenses hace más de un siglo, ofrecerá una vía fluvial más profunda, amplia y más larga que su contraparte panameña. Aunque la nueva ruta pudiera ofrecer beneficios económicos a los países que buscan evitar el Canal de Panamá (digamos China), la principal motivación de Rusia es mucho más política.
¿Cuáles serán las razones de Rusia para la consecución de este nuevo canal?
El país del norte de Asia, en esencia está buscando simplemente desafiar a las autoridades estadounidenses en el transporte marítimo internacional. Según Sergei Pravosudov, director del Instituto de Energía Nacional de Rusia, “la aparición de una vía acuática alternativa es un reto directo para EE.UU”. Un líder en investigación, asociado con el Instituto de Latinoamérica en la Academia Rusa de Ciencias elaboró un cálculo político afirmando que “los EE.UU perderán una cantidad considerable de control sobre un territorio, el cual, gracias al Canal de Panamá, ha estado bajo su control durante los últimos 100 años”.
Otros analistas se han enfocado más en la falta de beneficios económicos para Rusia, ya que esta se basa principalmente en las rutas marítimas del norte para transportar mercaderías y el país verá más beneficios financieros ampliando el tráfico marítimo en el Ártico. Francamente, China es quien puede ganar mucho más en este proyecto, ya que necesita una ruta más corta para los envíos de importaciones y exportaciones.
¿Qué tan grande es el Canal nicaragüense y cuándo empezará a operar?
El nuevo canal será de 72 pies de ancho y 65 pies de profundidad, lo cual empequeñece los 69 pies de profundidad y 40 pies de ancho del Canal de Panamá. Debido a su mayor tamaño, la nueva vía fluvial podrá recibir embarcaciones con un peso muerto mayor de 270,000 libras. Las autoridades nicaragüenses tienen previsto iniciar la construcción a finales de este año, con una fecha de funcionamiento parcial proyectada para principios de 2019. Sin embargo, los dueños de carga no esperan utilizar la operación completa del canal hasta 2029.
El papel de Rusia en el proyecto:
El papel de Rusia en el proyecto es de particular importancia para los funcionarios de Estados Unidos. Mientras que la nación es poco probable que ofrezca mayor apoyo económico u organizacional, por lo menos hasta 2015 elevará su presencia militar en el área. Los buques de guerra y aviones patrullarán la costa de Nicaragua y partes del Mar Caribe como parte de su acuerdo tripartito entre la nación de Latinoamérica y la China.
Exactamente el efecto de este proyecto en las embarcaciones estadunidenses aun está por verse. Por supuesto, el Canal de Panamá no va hacia ningún lado, pero una nueva opción operada por las naciones del Este, que EE.UU no considera necesariamente “aliadas” podría implicar diversas consecuencias económicas, políticas y sociales.