Cómo la Guerra Comercial Podría Afectar a la Industria del Transporte Marítimo

Ashley Boroski MendozaGeneral, Importación, Noticias de la industriaLeave a Comment

En la primavera de 2018, el presidente Trump empezó a aumentar los aranceles en muchos productos importados. Él ve estos aumentos de los costos de importación como un medio para obtener un fin. Al incrementar los costos de productos extranjeros, los consumidores pueden estar más motivados para comprar bienes hechos en los Estados Unidos. Al final, se supone que esto impulsará nuestra economía e incrementará la demanda de empleos. Por otro lado, el aumento de los aranceles también ha creado una guerra comercial. Países como China están colocando sus propios aranceles a aquellos productos provenientes de los Estados Unidos.

 

Recientemente, el presidente Trump expandió estos aranceles para incluir una amplia gama de productos de consumo popular. Antes de esta expansión, los costos de importación se dirigían mayormente a los materiales de construcción industriales. Eso significaba que los consumidores no verían los efectos de los aranceles por un tiempo, si acaso. Ahora, los consumidores y aquellos que se encuentran en el negocio del transporte marítimo, podrían estar viendo los efectos de estos aranceles pronto. Desde la disminución de la demanda hasta el incremento de precios, todos estamos esperando ver cómo se desarrollará todo esto.

La Guerra Comercial

Uno de los grandes efectos de estos aranceles es la guerra comercial resultante. Cada país afectado por los nuevos costos de importación tomaron represalias, inclusive Canadá. No solo eso, sino que las empresas estadounidenses que venden sus productos en el extranjero están observando un incremento en los costos.

La última ronda de productos en la mira es popular entre los consumidores. Desde bicicletas hasta refrigeradores, nada parece ser seguro. Inclusive, los cosméticos y herramientas estarán sujetos al nuevo impuesto del 10%. También se incluyó una categoría de productos de viaje, en la que se inscriben las billeteras y el equipaje como las últimas víctimas de los impuestos.

Otros impactos de la guerra comercial incluyen la suspensión de licencias para las compañías estadounidenses en el extranjero, así como la demora en las aprobaciones de una variedad de emprendimientos comerciales. No obstante, el enfoque principal de estos impuestos se sigue centrando en los bienes industriales.

Si China toma represalias de nuevo, el presidente Trump ha votado por imponer aún más aranceles. Eso significa que posiblemente no veamos un final próximo para esta guerra comercial.

Efectos Negativos

Para aquellos en la industria del transporte marítimo, las importaciones y exportaciones son materias importantes. Cuando se desencadena una guerra comercial, puede haber muchos efectos negativos. Dado que el transporte marítimo representa el 80% de todo el comercio, se garantiza que será el más afectado.

CNN estima que aproximadamente el 7% del comercio entre Estados Unidos y Asia podría estar en riesgo, así como el 1% de todo el comercio. Con los márgenes de ganancia ya reducidos de la industria del transporte marítimo, esto podría tener efectos desastrosos.

Los productos del mar representan una gran industria que ha sido blanco de la reciente lista de adiciones. La tilapia, el salmón, el bacalao y el atún están incluidos en dicha lista. Dado que los Estados Unidos importa $2.7 mil millones en pescado proveniente de China, esto podría tener efectos abrumadores en el mercado.

La industria automovilística también podría verse afectada. Si bien los vehículos no están siendo atacados, muchas piezas que van en ellos sí lo están. Por ejemplo, los asientos y las alfombras estarán sujetos a los nuevos impuestos.

Los materiales de construcción fueron apuntados originalmente y la lista solo se está expandiendo con los nuevos aranceles. Revestimientos, tornillos, martillos y electrodomésticos estarán sujetos a impuestos elevados.

El último gran mercado que se verá afectado es el de la industria cosmética. Una variedad de cosméticos y de productos de baño ya están incluidos para someterse a altos impuestos. Se espera que esta lista se amplíe mientras la guerra comercial continúe, apuntando a los artículos de lujo más populares en los Estados Unidos.

Efectos Positivos

Pareciera que no existen beneficios de una guerra comercial para aquellos en la industria del transporte marítimo. Sin embargo, se le puede conseguir un lado positivo si se mira con suficiente detenimiento. Mientras que el transporte marítimo extranjero sufrirá enormemente, el transporte nacional puede verse impulsado. Con la dependencia en productos nacionales, el país necesitará mejores maneras de trasladar productos a lo largo del país. Esto podría crear potencialmente toda una nueva industria de transporte que no habíamos visto nunca antes.

Otro efecto positivo de la guerra comercial es que no todos los productos de consumo están siendo atacados. El propósito de la guerra es apuntar a la infraestructura de un país, en lugar de atacar a los consumidores. Por esta razón, muchos productos se seguirán importando sin impuestos elevados. Por ejemplo, el calzado no está actualmente en la lista. Eso significa que el 70% del mercado del calzado en Estados Unidos que proviene de China se mantendrá intacto por los momentos. Los productos adicionales que están libres de estos nuevos impuestos son los teléfonos inteligentes, los televisores y prendas de vestir.

Un factor importante que hay que destacar es el de las zonas de comercio exterior. Si bien no hay una opinión clara al respecto, muchas compañías con la calificación de zona pueden evitar los nuevos impuestos. Dado que esta guerra comercial no tiene precedentes, actualmente las aduanas no han tomado una decisión al respecto. Con casi 200 zonas de comercio exterior en los Estados Unidos, esto podría ser una gracia salvadora para la industria del transporte marítimo.

Infortunadamente, los nuevos aranceles del presidente Trump están basados en una ley que fue establecida en 1962. La misma le permite al gobierno limitar las importaciones que representan una amenaza a la seguridad nacional. Si bien esto es discutible, la ley podría limitar las protecciones que brindan las zonas de comercio exterior. Las compañías y los transportistas por igual están esperando una decisión sobre esta nueva política. Por ahora, al menos, las zonas comerciales son algo a tener en cuenta.

Lo que está claro sobre las guerras comerciales es que los negocios y los consumidores verán un cambio con el tiempo. No está claro cuan grandes serán estos cambios, ya que esta guerra comercial no se parece a ninguna otra en nuestra historia. Si bien Estados Unidos está posicionado únicamente para ganar, nadie sabe cuál será el resultado final.

Perspectiva para la Industria del Transporte Marítimo

Esta guerra comercial podría tener serios efectos en la industria del transporte marítimo. Es importante para los transportistas que se mantengan actualizados a medida que los cambios ocurran y estén preparados para ellos.

Sin embargo, también podría crear un nuevo tipo de sistema comercial que ayude a respaldar la venta de productos nacionales. Nadie sabe con exactitud qué va a pasar, pero se aproxima un cambio.

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Ashley Boroski Mendoza
Ashley has worked in the George W. Bush Presidential Administration in both the White House and DHS. She later worked as a policy advisor in the Senate and representing top retailers to the federal government at the premier retail trade association. Currently, she is the Head of Business Development at ShipLilly ensuring exceeded growth annually.

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