Los chinos han cumplido su palabra al emitir nuevos aranceles en productos estadounidenses. China había amenazado con responder del mismo modo a los aranceles del 25% de Donald Trump en las importaciones chinas. Ambos regímenes arancelarios están valorados en $34 mil millones por ambas partes.
Hay exportaciones de Estados Unidos a China valoradas en $545 mil millones que se han visto afectadas por estos aranceles de represalia, incluidos el algodón, el borbón, el tabaco, la carne de cerdo y la soya. La industria del transporte marítimo ha estado tratando de mitigar los riesgos asociados con esta cuasi guerra comercial. Por ejemplo, un barco estadounidense lleno de exportaciones de soya intentó superar la fecha límite pero se perdió en media hora.
Temores sobre las crecientes tensiones
China ha demostrado que no tiene temor de golpear a los Estados Unidos. Donald Trump también está aumentando la retórica y las amenazas. La administración de los Estados Unidos anunció que estaba planeando implementar otros aranceles por un valor de $16 mil millones en productos chinos en este mes. La mayoría de los expertos cree que China devolverá el favor nuevamente.
El Ministerio de Comercio chino ha indicado que considera que los Estados Unidos viola las normas de la Organización Mundial del Comercio. China no ha estado reduciendo sus palabras sobre lo que denomina “la guerra comercial más grande” en la historia. Por su parte, el gobierno de los Estados Unidos sostiene la idea de que estos aranceles garantizan la equidad en el comercio internacional.
Las empresas que están atrapados en el fuego cruzado
Mientras los dos gigantes económicos pelean, las empresas están pagando las consecuencias. Por ejemplo, los transportistas en los Estados Unidos han cancelado algunas exportaciones y, como consecuencia, han tenido que sufrir una pérdida en sus ganancias.
Hay preocupación de que esta creciente guerra comercial tendrá consecuencias a largo plazo que aún no son fáciles de predecir. De acuerdo a Axios, aquellos que operan con la producción de soya y bourbon no pueden hacer planes a largo plazo porque no están seguros que vendrá después.
